En este año 2011 rompí un nuevo record personal al haber leído treinta y ocho libros. Proximamente vendrán las reseñas de aquellos que faltan pero para finalizar este primer ciclo les presento una novela histórica del célebre escritor Estadounidense Cormac McCarthy.
Meridiano de sangre es una genuina novela cruda sobre el oeste americano del siglo XIX, donde no existen los valientes alguaciles de las películas si no la trágica realidad, un asilo para los bandoleros, violadores y demás calaña criminal. Nuestro protagonista es sólo conocido como "el chaval", quien nace bajo las Leónidas en el año 1833 y la vida lo convierte en una persona con pocos escrúpulos, pero aún queda un poco de piedad dentro de su corazón. Este personaje pasa a un plano secundario por la mayor parte de la novela una vez que entra el Juez Holden: Un hombre totalmente calvo, albino y extremadamente culto, quien se vuelve el líder espiritual de una la banda Glanton, un grupo paramilitar concentrado en asesinar al mayor número de indios y cortar sus cueros cabelludos para recibir recompensa. El Juez comete actos sanguinarios, sus compañeros lo tachan de pedófilo y asesino de niños pero siempre lo siguen. En un momento la banda es incitada a la violencia por el Juez y su masacre afecta no solo a los indios, si no a los inocentes y aquellos que pagaron por sus servicios.
No les arruinaré la experiencia contando el final, pero éste esta abierto a la imaginación del lector, aunque algunos aspectos de la naturaleza del Juez nos dan una idea del destino de uno de los personajes. La última lectura del año mas una grata para acabar.
Calificación: * * * * * * * * 1/2